martes, 26 de octubre de 2010

One month ago...

Estábamos en NY.
Creo que sobran las palabras.
Doy por finiquitada mi presencia en este blog.
Un saludo :)

lunes, 25 de octubre de 2010

De la noche a la mañana...



La última noche en NOLA es una auténtica ‘’americanada’’, después de ver el partido de fútbol americano, si no me equivoco, nos vamos todos a la llamada Open House, que es una fiesta post-partido. Es una fiesta alucinante, no tengo palabras para describirla, lo que tengo claro, es que a todos nos parece corta, la fiesta acaba, la gente marcha, todo es como un sueño, nadie quiere ni pensar que se acaba…

Mi chico, Jacob, nos llama, nos vamos. Procedimos a dejar a Jesús en su casa, y nos quedamos, Vanessa con su chica, Kathleen, y yo con mi chico, Jacob, a ver una película en casa de mi chico. No hay palomitas y la película tampoco es muy buena, pero es una de las noches más inolvidable de todas, es la última, y nosotros, lo sabemos, empieza la tristeza, Kathleen dice que es hora de irse, pero Jacob, dice que no, que hay que aprovechar hasta el último segundo de la noche. Un poco más tarde, llevamos a las chicas. Empezaron los primeros síntomas con Vanessa, no quiere irse, y se olvida el bolso.

Se acaba la noche y, por desgracia, hasta en el mejor de todos los sueños, empieza la mañana, la última mañana...

Me despierto pronto para hacer la maleta, todo está muy frío, no consigo escuchar a los perros de Jacob, oigo algún paso, sé que Jacob y su madre están despiertos, pero no consigo ir a saludarlos, no quiero saludarlos, por la que, posiblemente, sea la última vez. Mientras hago la maleta, me conecto al Facebook, está Jacob conectado, me pregunta si echamos el último Fifa10 en la X-Box 360, me suena demasiado triste, pero le digo que si. Durante la partida, no hay palabras, tan solo jugamos, intento decirle algo, pero es que no puedo!! Me da la impresión de que el también trata de decirme algo, no puede. Acabamos la partida y él se marcha para abajo, más tarde me dice que si tengo hambre, yo, le digo que si, que ahora bajo, pero en realidad, tengo un nudo marinero, de los grandes, en el estómago.
Desayuno con él, tampoco hay muchas palabras, es una mañana muy triste para ambos, muchísimos inolvidables momentos hacen de ese, un rato muy duro, que ninguno de los dos queremos pasar, pero el sueño se acaba. Llega la madre a casa, me voy! Jacob se tiene que quedar, nos despedimos, es todo muy rápido, de la casa a el aeropuerto hay unos 15 minutos, el viaje se me hace eterno, no puedo creerme que no voy a volver a ver a Jacob en mucho tiempo, entre eso y las ganas que tengo de ver a los demás, está siendo un momento desolador.

Llego al aeropuerto, de momento, está todo mejor de lo que esperaba. Poco a poco, alguno se tiene que marchar, no nos podemos resistir, empieza a caer alguna lagrimilla, se empiezan a escuchar frases inolvidables como I saw a tear!, empiezan risas, fotos, y sobre todo, muchos abrazos.

Se están marchando todos, pero antes, nos sacamos una foto en grupo, es imposible olvidarse de este viaje, pero poder ver todas las fotos que nos sacamos, va a ser muy especial. Juan tiene toda la razón del mundo, agradeceremos y mucho, el uso del blog.
No queda ni una sola persona del intercambio, nos intentamos poner en contacto, con alguna de las chicas que no pudieron venir, a causa de una carrera. Nos despedimos muy rápido de ellas el día anterior y ya las echábamos de menos.

Sabemos que nos llevamos un recuerdo inolvidable, quien nos iba a decir el último día de New York, que lo íbamos a pasar tan bien. ¿Quién se va a olvidar de los jueves de competición de natación y los partidos de volleyball? ¿Y de los Greenies?

jueves, 21 de octubre de 2010

& they were all born pretty in NY city.

Día 1- El viaje

Salí de casa a las 4:10, solo para comprobar que a mi llegada a la parada el autobús aún no había llegado, 15 minutos más tarde el autobús hace acto de presencia.

En el transcurso del trayecto a coruña salio por primera vez a la luz despues de su editaje la última entrega de la maravillosa saga VPD.

A nuestra llegada al aeropuerto, tras facturar y desayunar con Paula, Dany, Carla, Xurxo, Pablo, David, Alejandro, Alba, Paz y Juan Gil embarcamos con destino a Madrid.

Después de largas horas de espera en Madrid esperando que arreglaran la ESTA (Electronic System for Travel Authorization) de Mariña y Verónica, lo más peculiar, la razón por la cual no coincidía el pasaporte de Verónica... Es sabido por todos que las fotos de los documentos no son las mas favorecedoras y que no hay otro amor como el amor de madre... si no que se lo pregunten a Verónica, que si pilla a la suya en ese momento... Tras este incidente embarcamos por fin en un avión que nos llevaría al mejor país del mundo. Emprendíamos por fin el viaje en el que llevábamos pensando desde 3º de ESO, el que llevábamos planeando un año, ese con el que llevábamos soñando varios meses.



Tras 8 interminables horas de “me duermo-no me duermo”, ver películas y jugar a las cartas (ahora que ya volvimos, puedo contar las cosas que no deberíamos de haber hecho) llegamos a mi ciudad natal, Newark NJ. Tras un viaje en el Air Train, un tren a NY Penn Station, un metro a 96th avenue y 7 interminables manzanas llegamos por fin sudados y cansados de tirar por las maletas al HI NY.
Nos acomodamos, nos duchamos citamos en una terraza, la cual tenía feas y obesas ratas.

Más tarde fuimos a una pizzería y tuvimos la increíble suerte de encontrarnos a la mujer barbuda en persona! Y nos habló! el/ella y su amigo que era un tanto... inculto ya que situaba a Galicia en Brazil...

A nuestra vuelta al albergue, después de comer fueron cayendo una por una todas como moscas... Las últimas en pie? Mariña, Ángela y Yo, aunque en escasos minutas también caeríamos en la tentación. Esa noche me dormí contemplando NY, como mejor se puede acabar el día?

sábado, 9 de octubre de 2010

Ornitorrinco II


Como ya se ha dicho en otra ocasión en este mismo blog, el ornitorrinco esta transpasando fronteras.

Primero fue en New York , cuando en el museo del MOMA se escucho, a “pleno “ pulmón , una canción un tanto peculiar cantada por ciertos estudiantes del I.E.S. de Ames. Que la gente no piense que esto fue un escándalo, que nos pusimos a cantar la canción en el museo mientras que otra gente, más normal por cierto, observaba , admiraba y criticaba silenciosamente ciertas obras del museo; sino que aprovechamos que en medio de una especie de hall había un micrófono por el que cualquier visitante del museo podía gritar , ya que era una especie de homenaje a la obra “El grito". Fue así como aprovechamos la ocasión de entonar la ya entonces famosa canción.

Una vez en New Orleáns, esta canción se dio a conocer en la fiesta de bienvenida que los americanos nos hicieron el pasado sábado. No me acuerdo, o no me quiero recordar cómo surgió, pero de repente estábamos la mitad de nosotros en frente de nuestros amigos americanos, que sentados en un sofá , escuchaban atentamente cómo cantabámos el ornitorrinco. En los primeros cinco minutos no pararon de reír. Luego, cuando ya no les quedaban más fuerzas para reírse, nos pidieron que la volviésemos a cantar. No les costó mucho convencernos. Volvimos a cantarla, sólo que esta vez éramos más. Volvieron a reírse un rato bastante largo y nos dijeron que teníamos que cantar la canción en la asamblea, que es una especie de reunión a la que todo el instituto asiste cada semana en el salón de actos, bastante más grande que el nuestro por cierto.

Nosotros les dijimos que por supuestísimo que no, pero ellos insistieron tanto que dijimos que sí , pero con una condición: que ellos se aprendieran la canción y que la cantaran con nosotros en la asamblea. No di credito cuando dijeron que sí, que necesitaban que les enseñásemos la letra. Así que cogimos un papel, un boli y… hasta Mrs Quimbay se puso a bailarla y cantarla!

Aunque finalmente no pudimos cantarla en la asamblea debido a que no hubo el tiempo suficiente, si que tuvimos la oportunidad de aprovechar nuestras presentaciones en las clases de español para enseñarles la canción a todos los niños americanos que quisieran aprenderla. Así que Xiana, Mariña y yo hicimos lo propio y nos pusimos delante de dos clases a cantar el ornitorrinco, luego les escribimos la letra y finalmente lo cantamos con todos ellos!

Incluso hoy , en las presentaciones para los más pequeños , la canción tuvo su minuto de gloria. Así que ya sabéis, ni canción del verano, ni jazz, ni nada… Aquí lo que se lleva es … EL ORNITORRINCO!

Ornitorrinco ornitorrinco,
Ornito, ornito, ornito, ornito, ornitorrinco,
Menospreciado durante siglos
Por ser el único mamífero con pico.

Que no tiene alas,
Y pone huevos,
Y hay que viajar a Australia para conocerlo…

ORNITORRINCO, ORNITORRINCO…!

jueves, 7 de octubre de 2010

Historia, cultura y arte.

El martes 4 fue el día que presentamos nuestros trabajos y a decir verdad fue bastante mejor de lo que esperaba.

Los afortunados o desafortunados alumnos de la Ms. Tiniacos no pudieron escucharla puesto que tenían examen.

En clase de Ms. Davis si que hicimos la presentación y fue muy gracioso ver la cara que ponían, tanto los alumnos como la profesora, en el apartado de arte y arquitectura cuando les decíamos que hay una muralla romana, una iglesia... y en el de cultura cuando dije que muchos peregrinos llegaban a Compostela después de andar muchísimos quilómetros.

Cuando terminamos nos hicieron preguntas sobre las diferencias entre España y New Orleans: los diferentes horarios, costumbres..., no entendían ni como eramos capaces de aguantar desde la 8 hasta la 3 sin comer más que un bocadillo ni, al solo tener clase por la tarde los lunes, que hacíamos desde que acababan las clases hasta la cena.

miércoles, 6 de octubre de 2010

¡Lo conseguimos!


Tras mucho suplicarle a Juan que nos llevara de nuevo al French Quarter, la zona que más nos gustó a todos, por fin lo logramos. Lo más gracioso es que lo conseguimos gracias a nuestra capacidad de enfrentarnos a las adversidades. Quién iba a decirles a los mejicanos del consulado que unos turistas españoles irían por ahi de visita. La charla no fue precisamente amena, pero las bolsas que nos dieron llenas de panfletos turísticos son maravillosas.

Después de unas cuantas compras por el French Market nos fuimos a degustar unos beignets, la cosa más rica que uno se pueda imaginar. Allí descubrí mis origenes ocultos brasileños (no acabo de entender que me vio el camarero que le hiciera pensar que soy brasileira).

Y por fin, el concierto de Dr.John. El ambiente impresionante, el parque estaba completamente abarrotado, tanto de gente como de tiendas. Y yo, pasando un rato de cotilleo con Einés disfrutando de buena música.

Para terminar volvemos al instituto en el tranvía, y a pesar de que parecía todo lo contrario, conseguimos llegar al instituto a la primera. Gracias Juan, en el fondo eres un buen guía.

Lo mejor del día, ¡por fin conseguí el negrito con el saxofón!

martes, 5 de octubre de 2010

Nueva Orleans: Fin de Semana



Bueno, el fin de semana fue bastante interesante y divertido, pero antes de comenzar a hablar de él (vais a tener que aburriros un poco más) debemos empezar con el día anterior y uno de mis favoritos a nivel personal: el viernes.

El viernes fue un día de clase más o menos normal. Tuvimos una reunión con un profesor llamado Mr Butterman (lo sé, el nombre puede sonar ridículo para aquellos que saben inglés, pero no estamos aquí para insultar y/o meternos con nadie) que nos hizo una presentación sobre Nueva Orleans, la Laura Plantation (que veremos esta semana) y sobre un pirata cuyo nombre, desafortunadamente, no recuerdo.

Como niños



Por fin llega el día de nuestra exhibición de sabiduría delante de los niños pequeñitos. Y como no, tenemos que dejar quedar bien a nuestro país. Para ello procedemos a cocinar tortilla en un hornillo electrico. Y menos mal, sabia inocencia, a los niños les encantó. La tortilla no era la mejor que probé en mi vida, pero no fue culpa de los cocineros, ellos lo hicieron genial (con quemaduras incluidas).

Despues nos toca demostrar nuestras habilidades como payasos de turno, algo que bordamos. Nosotros bailando y cantando el ornitorrinco y canciones de palmas y los niños mirándonos como si estuviésemos como cabras. Jamás pensé que me avergonzaría de mis actos delante de un niño pequeño, pero así fue. Pero lo mejor de todo es que no me importa, por que va a ser uno de esos recuerdos que no se borran en la vida y que te hacen sonreir al recordarlo.